viernes, 30 de septiembre de 2011

LABROIDES DIMIDIATUS



Los Labriodes dimidiatus son peces conocidos por todos como peces limpiadores o desparasitarios. Podemos decir de él que es prácticamente indispensable en nuestro acuario ya que sus hábitos de alimentación basada en exoparásitos (zoobentos) y mucus de la parte exterior de los peces (neckton) son favorables para todos los vecinos de éste pequeño lábrido. Se trata de una relación simbiótica que es muy reclamada por el huesped.

Su morfología es muy característica ya que la cola se integra en el propio cuerpo, dándole una forma más esbelta; sus colores blanco y azul dividido por una ancha banda negra le hace fácilmente reconocible aunque existe un blenio que simula sus colores y al fingir ser un dimidiatus y realizar la característica función desparasitadora del lábrido, arranca escamas y trocitos de carne a los demás peces.
Se trata de un pez monógamo que permanece en lugares donde los demás peces puedan acudir a desparasitarse y limpiarse externamente gracias a los hábitos del pez limpiador. La intensidad de la limpieza no es proporcional al tamaño del pez cliente.
Un visitante con el que no estén familiarizados es recibido con un baile consistente en un movimiento de cola que impulsa su parte trasera hacia arriba y hacia bajo. Los limpiadores inexpertos juveniles incluso actúan así cuando un buceador se está acercando, es una forma de estimar la edad del labroides dimidiatus.

Tamaño
Hasta los 14 cm en estado salvaje. Su esperanza de vida máxima con constancia científica es de 4 años.

Hábitat



Distintos puntos del Indopacífico ( Mar Rojo, Este de África, periferias de Japón etc ). Se trata de una especie asociada a los arrecifes coralinos no migratoria, que se mueve en un rango desde 1 hasta 40 m, aunque normalmente lo encontraremos a los 30 m.

Tamaño del acuario


No existe un tamaño señalado como óptimo. Lo que se deberá tener en cuenta es la cantidad de roca viva que podamos mantener y que contribuya a su mantenimiento. Acuarios voluminosos permitirán mantener animales de mayor tamaño con lo que el sustento a través de la desparasitación está asegurada.

Condiciones del agua


Las normales para una instalación de arrecife. Ph entre 8,2 y 8,4, densidad entorno a los 1023 y niveles mínimos de compuestos nitrogenados.

Temperatura


La normal para instalaciones de arrecife, entre 24 y 28 grados.
 
Mantenimiento


Su mantenimiento en cautividad será preferentemente en presencia de fondos de arena, fondos rocosos y masas de macroalgas que fácilmente podemos simular en nuestro Acuario. Podemos decir que el labroides dimiditus es un pez denominado “indicador” de la salud de nuestra instalación, ya que se trata de una especie muy sensible a los nitratos y por ello, una subida de este parámetro puede acabar pronto con su vida, no siendo una especie indicada en Acuarios que no hayan completado su proceso de maduración.
 
Alimentación


Su alimentación en cautivad no plantea problemas tras un periodo de aclimatación al alimento congelado. Durante la primera fase de adaptación no la tolerará como norma general y la escupirá repetidas veces hasta que se acostumbre. No hay que preocuparse en exceso por este comportamiento ya que completará su dieta con la microfauna presente en el acuario y los propios exoparásitos de las otras especies como ya hemos mencionado.
 
Diferencias entres sexos


No distinguibles a simple vista.

Asociación


Una gran ventaja al incluirlo en nuestro Acuario es que no hay que preocuparse en absoluto por problemas de incompatibilidad, es compatible y perfectamente sociable gracias a su comportamiento simbionte con cualquier especie, incluso con las más agresivas, menos, por supuesto, con ella misma ya que con estos mostrarán su cara más agresiva al ser como la gran mayoría de peces marinos: muy territoriales con sus congéneres.
 
Reproducción


Aunque se trata de una especie solitaria, estas estaciones de limpieza están ocupadas por un par de ejemplares adultos, un grupo de juveniles o un grupo de hembras acompañadas por sólo un macho dominante, donde una de las hembras se convertiría en un macho dominante funcional  si este desapareciera. Por ello sabemos que se trata de una especie hermafrodita que además posee fertilización externa y no suelen vigilar sus puestas.

Grado de dificultad: principiante, avanzado, experimentado

Aficionado
avanzado.

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